Reportaje sobre experiencia de navegación en el Lago Alqueva con Amieira Marina (parte 2/5)

¡Todos a bordo!

Barco-casa en el Lago Alqueva (Alentejo, Portugal)En las instalaciones de Amieira Marina nos dieron un curso para aprender a manejar la nave, primero teórico y después práctico. No se nos ocurrió comenzar nuestro viaje sin preguntar todo lo que hiciese falta, desde cómo amarrar el barco a un muelle o una boya a cómo administrar la energía. Del combustible no nos teníamos que preocupar, ya que este tipo de embarcaciones consumen poquísimo y su depósito da para un viaje superior a una semana. Incluso nos proveyeron de un wifi móvil para poder conectarnos a internet (se alquila en las oficinas) y un móvil con línea directa a los teléfonos de los responsables de Amieira Marina por si sucediera algún contratiempo. También hubiéramos podido alquilar bicicletas pero eran demasiadas para guardarlas en el barco sin que nos restaran espacio.

Así es un barco-casa para diez

Interior de un barco casa para 10 en el Lago Alqueva (Amieira Marina, Alentejo)Cada ocupante escogió su habitación. Teníamos dos habitaciones con cama de matrimonio y dos cuartos con dos camas individuales cada una que formaban parte de la estructura de nuestro Nicols 1350 de nombre Estrela I. A esto se le podía añadir la mesa con bancos que se abría por arte de magia para convertirse en otra cama doble con objeto de proporcionar descanso en condiciones hasta diez personas, aunque no nos hizo falta utilizarla en ningún momento. A cada habitación le correspondía un cuarto de baño pequeño con váter y ducha con agua caliente/fría. En la proa también había ducha exterior de agua caliente/fría.

 

Salón del barco-casa de Amieira MarinaTeníamos una cocina de gas con cuatro fogones, un horno y todo el menaje (platos, vasos, cubiertos, fuentes, etc.), así como frigorífico y un amplio salón donde comer o cenar todos juntos. Dado que tuvimos la suerte de que nos hiciera un tiempo veraniego, las comidas las hacíamos fuera en popa y durante las cenas, cuando la noche refrescaba (baja mucho la temperatura y se siente la humedad y los mosquitos), preferíamos quedarnos dentro. Tras cada sobremesa jugábamos con los juegos de mesa que habíamos traído con nosotros. O tomábamos el sol en cubierta, nos bañábamos y, por supuesto, nos deteníamos a conocer pueblecitos como Estrela, Luz o las bellas Monsaraz y Mourão para disfrutar de sus emplazamientos medievales bien cargados de historia (ambas cuentan con dos de los castillos del Alentejo que no debíamos perdernos bajo ningún concepto).

Pablo, Juampe y Manu en el barco-casa de Amieira Marina (Lago Alqueva, Portugal)Los barcos Nicols se pueden manejar desde dos lugares distintos. Uno en el interior y otro puesto de mando en el exterior, justo encima. La primera opción es ideal para los menos expertos, con un GPS que utilizar para seguir las rutas seguras y conocer las zonas por donde no se puede pasar y un sónar que nos advierte de la profundidad del lago para no encallar de ninguna de las maneras. Algo realmente difícil, ya que el barco es prácticamente plano y podría navegar por aguas con menos de un metro de profundidad, cosa que es inusual que suceda en el Alqueva salvo que vayamos a atracar directamente en una isla con playa, que se podría hacer si decidimos amarrar la nave a los árboles o utilizar dos estacas que clavar en la tierra (esta opción no nos atrevimos a probarla). La segunda opción es para los que conocen más la zona o se dejan asesorar por alguien que se quede abajo atento al GPS o sónar. O para trayectos cortos y muy sencillos.

¿Es fácil pilotar un barco-casa?

Sele y Rebeca en un barco-casa por el Lago Alqueva (Portugal)Es la pregunta que todo el que se interesa por una experiencia en barco-casa sin permisos quiere solucionar. Y la respuesta es clara. Por supuesto que es sencillo pilotar un barco de este tipo. En primer lugar porque nos lo explican in situ y hasta que no nos ven seguros no nos dejan ir. En segundo lugar porque el Lago Alqueva es tan quieto como una piscina y su oleaje es mínimo en condiciones climáticas extremas (algo muy inusual). Y en tercer lugar… porque de los siete tripulantes que formamos parte de esta aventura pudimos pilotar todos y cada uno de nosotros sin tener ninguna idea previa. Ninguna.

 

 

GPS del barco-casa de Amieira Marina (Alentejo, Portugal)En el GPS que llevamos con nosotros nos proponen rutas de seguridad y nos informan de embarcaderos, zonas de baja profundidad y por dónde no debemos pasar bajo ningún concepto (como por ejemplo a aguas españolas). La velocidad máxima es de aproximadamente 11 kilómetros por hora, por lo que tampoco podemos ir muy rápido. Y en el panel de control sólo tenemos los botones de encendido/apagado, una palanca con las marchas y un volante con el que controlar la dirección. Que nadie dude que está hecho para que sea muy fácil.

 

 

Barco casa en el Lago Alqueva (Alentejo, Portugal)¿Algún consejo para iniciar navegación por las aguas del Alqueva? Lo primero no escatimar cuando estemos en la marina y hacer caso a los consejos del personal. Tratar de seguir la ruta propuesta en el GPS y manejar el volante con mucha suavidad. Un barco no es un coche y los volantazos no sirven de nada. Conviene siempre enderezar la nave antes de cambiar de dirección y mover el volante sin ninguna vehemencia. Por supuesto debemos tener en cuenta la fuerza y la dirección del viento y no es necesario ir en la máxima velocidad de forma constante. Lo mejor es tomárselo con calma y no viajar con prisas. Un barco de este tipo es para disfrutarlo, pasear con él y aprovechar que tenemos la suerte de tener “un pequeño yate” sin necesidad de vender un riñón ni tener carnet de patrón de barco.

Nuestra ruta en el Grande Lago Alqueva

Hay algo más de 80 kilómetros, lo que vienen siendo 10 horas aproximadamente, entre el muelle de Amieira Marina y el embarcadero más septentrional en Juromenha. Pero los recovecos por los que podemos movernos son infinitos. En nuestro caso lo más alejado que llegamos fue Monsaraz (aprox a 5 horas desde Amieira Marina a una velocidad constante de 10 km/h) y nos planteamos una ruta que tuviera pueblos donde detenernos, embarcaderos solitarios en los que amarrarnos para bañarnos o pernoctar (tanto a muelle como a una boya o baliza) y en la que fuésemos sin prisas disfrutando del paisaje. A continuación podéis ver un mapa con el recorrido de ida por el Lago Alqueva. El regreso, obviamente fue, al punto de partida.

Mapa de la ruta por el Grande Lago Alqueva (Alentejo, Portugal)Puntos de la ruta: Amieira Marina – Presa de Alqueva (pernoctación en boya del embarcadero) – Estrela – Aldeia da Luz – Campinho (baño y pernoctación en el muelle) – Mourão – Monsaraz – Mourão (pernoctación en embarcadero) – Monsaraz – Luz (pernoctación en embarcadero) – Amieira Marina.

 

 

 

 

 

En el barco-casa del Lago Alqueva (Alentejo, Portugal)Antes de partir con el barco nos dieron un mapa desplegable enorme que recogía posibles paradas, anunciando localidades e incluso embarcaderos donde detenernos o pasar la noche. Muy útil a la hora de ir planificando la noche anterior lo que íbamos a hacer al día siguiente. Y para que no se nos escapen detalles que aparecen durante el camino como pueblos, molinos, ruinas o zonas naturales de interés turístico. Así como por dónde no podemos entrar con el barco (como, por ejemplo, en aguas españolas).

 

 

Autor : Sele

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